Tercera participación en esta carrera, las tres últimas ediciones sin fallar, todas en cierto modo parecidas: sol, frío, el mejor cielo azul de Madrid y un recorrido para volar bajito. Aranjuez es el 10.000 más rápido de Madrid, y probablemente el que más corredores de nivel convoca. En lugar de hablar de mis sensaciones en carrera, que no le importan mucho a nadie, voy a describir un poco el recorrido por si algún corredor despistado aún no ha venido a verlo.
El primer mil es llano y rápido y, si lo permiten las aglomeraciones de salida, puede hacerse ya casi a velocidad de crucero, después la calle pica un poquito para arriba y toca sacrificar algún segundo para evitar quemar demasiadas naves tan pronto pero enseguida se pasa el 2 y recuperamos bajando primero y llaneando después hasta tropezar con el río justo en el Km 3. A partir de aquí iremos bastante rato por la ribera izquierda del Tajo, en la parte más bonita del recorrido; hay poca gente animando y muchos ratos solo se oye el sonido de los pasos sobre las hojas caídas y la respiración rítmica del grupo. No anima tanto como el paso por la Puerta del Sol del MAPOMA pero en cierto modo a mí me gusta más.
Alrededor del 4,5 una curva a la derecha nos mete en los jardines del palacio y lleva a bordear enseguida la casa del labrador, aunque a estas alturas el ritmo exigente ya no deja muchas ganas de hacer turismo; el paso por los jardines se hace rápido, dejamos el 5 y el 6 sin ceder tiempo y salimos ya a buscar el 7. A partir de aquí la carrera es cosa de negociar tres rectas, la primera por la calle de la Reina devuelve el público y la animación a los corredores, que ya empezábamos a echarlos de menos, después, giro de 90º a la derecha y el repecho más duro de todo el recorrido, ciento y poco metros bastante molestos cuando llegas ya pensando que solo falta echar el resto en el último km. Nada más coronar nos encontramos el 9 y encaramos la larga recta de Meta, con la fuente de la Libertad y los arcos publicitarios como referencias visuales. Si no llegas muy mal no es dificil mejorar diez o quince segundos tu ritmo medio en este último mil.
Hoy salimos cuatro canorítmicos, David y yo a mejorar nuestras MMP en 10K, Jorge a convencer a su abductor y su piramidal de que hay que ir volviendo a funcionar, y el Sueco a pegarse un paseito tras San Sebastián y a dar ánimos a su panda de runners del Club Alberto Juzdado. Así descritos, creo que los cuatro hemos conseguido nuestros objeticos con creces, David 41:02, minuto y medio menos que su MMP aunque los cronos acabados en 01 ó 02 siempre sean un poco frustrantes y más en este caso donde te dejan a las puertas del mítico minuto 40. Servidor con 39:34 que hasta el km. 6 tenían vocación de sub39 pero que luego la cruda realidad fisiológica dejó en su sitio exacto. Me hubiese encantado ser sub39 pero honestamente creo que aún no llevo esa marca en las piernas, la próxima vez tendrá que ser. Jorge terminó con molestias pero encantado y a un digno ritmo de 5:30 el Km. que ha incluido Walk breaks (término que ya se animará a explicar alguien más adelante), y mucha más vidilla social con otros runners que en el grupo de 4'/km. donde únicamente nos comunicamos soplando, resoplando o gimiendo, en función de lo que aconseje el momento.
Mención especial a las merecidas cañitas tras el esfuerzo en la Rana Verde; qué sería del atletismo popular sin las cañitas de después... Un placer compartir con Jorge y David los sesudos análisis de carrera y un montón de detalles sórdidos sobre lo imperfecto de la pisada del ser humano corredor en general y de Jorge ya más en particular :o) Sois grandes ambos.
Y eso es todo por mi parte, la SanSil, si la corro, pienso hacerla de paseo; el próximo objetivo claro será la media de Getafe si no nos depistamos pillando dorsal. En maratones de momento ni pienso en pensar.
1 comentario:
Por añadir algo a la descripción de Jesús, yo diría que además de ser el más llano, Aranjuez es el mejor diez mil de Madrid, no sé si de más allá, porque sólo he corrido carreras en esta provicia, pero la organización, el recorrido, el silencio del corredor junto al rio, las carreras juveniles e infantiles que hacen sentirte aún más ilusionado con la carrera, y el tiempo que al final siempre hace un sol de justicia, la pone en mi modesto punto de vista en el número uno de este tipo de carreras, ni san silvestres ni csics.
Aquí he hecho mi mejores tiempos y en este 2008 el peor, aunque en este caso mi lucha no iba contra el reloj, si no contra mi mismo.
Por hacer un resumen un poco más personal, decir que me coloqué atrás, muy atrás, para no molestar a los que iban a correr más que yo, salí tranquilo, aguanté 2km a 6 el mil, y de repente la memoria esa que dicen que tiene las piernas hizo que me pusiera a 5'30, en cada paso kilométrico me decía a mi mismo de bajar el ritmo, pero no lo conseguí, es más como hice 4 walk breaks realmente iba un poquitín más rápido.
Al final la sangre hierve y es difícil controlarse, de todas maneras, en el último mil, no me calenté, más que nada, no podía, parece mentira pero haber corrido 12 km en las últimas 3 semanas y haber hecho el último entrenamiento de 10km en Enero creo que tuvo algo que ver.
Lo peor, las molestias en el piramidal a partir del 7.
Lo mejor, haber corrido esta espectacular carrera, a última hora de improviso y con dorsal prestado, gracias Guada.
Una mención especial al corredor del 10km de 6 el mil, el corredor del cano-ritmo, increhible y muy gratificante, ver a cantidad de gente sufriendo por bajar de la hora, muchísimas parejas de corredores, el experto acompañando y aconsejando al novato, dando ánimos, páutas, consejos, para que luego digan que correr es un deporte individual.
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